Museo de las termas Romanas de Alhama de Murcia (Centro arqueológico de los baños)

En el centro histórico de Alhama de Murcia, a los pies del Cerro del Castillo,  se conserva un complejo termal de época romana. Fue declarado Monumento Histórico-Artístico, de carácter nacional, en 1983. La singularidad de estas termas romanas radica en sus dos espacios diferenciados, uno destinado al baño medicinal y otro al lúdico. El primero de ellos está compuesto por dos salas abovedadas con una piscina común. El segundo cuenta con las estancias habituales de las termas: salas de agua fría (frigidarium), templada (tepidarium) y caliente (caldarium). Con el ocaso del Imperio romano, las termas sufrieron un estado de abandono hasta la llegada de los árabes en el siglo VIII d.C., que las reutilizaron, dando incluso su nombre a la ciudad, Alhama, “el baño”.

Al pie del cerro del castillo y aprovechando la existencia de un manantial de aguas termales, en el siglo I después de Cristo, los romanos construyeron unas termas que se utilizaron hasta el siglo IV.

La cultura material de este período (vasos, platos, monedas o adornos) nos muestran el esplendor del poblamiento ibérico y romano de la zona.

Las thermae constituían uno de los lugares de ocio preferidos por los romanos para bañarse, tomar masajes, charlar y hacer deporte, es decir, para conseguir el bienestar del cuerpo y del espíritu.